Las personas somos lo que somos por quien nos inspira. Desde que nacemos, construyen nuestras personalidades, intereses y ambiciones los reflejos de la gente a la que admiramos, de nuestras referencias. Bruno lleva mucho tiempo con una espina clavada: no recuerda cada nada de quien más le influyó en su vida. Su tía Xela murió cuando él tenía 5 años y solo le quedan de ella los recuerdos de otras personas. Por eso, 18 años después, Bruno decide transitar las caras y lugares que vivieron a su tía para dar luz a este conflicto interno a través de la primera herencia que le dejó: el impulso creativo.
Semana do Cinema Galego | Os espazos en branco
Las personas somos lo que somos por quien nos inspira. Desde que nacemos, construyen nuestras personalidades, intereses y ambiciones los reflejos de la gente a la que admiramos, de nuestras referencias. Bruno lleva mucho tiempo con una espina clavada: no recuerda cada nada de quien más le influyó en su vida. Su tía Xela murió cuando él tenía 5 años y solo le quedan de ella los recuerdos de otras personas. Por eso, 18 años después, Bruno decide transitar las caras y lugares que vivieron a su tía para dar luz a este conflicto interno a través de la primera herencia que le dejó: el impulso creativo.
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